Jornada 1: Bogotá - Cambao - Guaduas
Otro ejemplo de viaje corto de fin de semana, lo realizamos a inicios del 2019 con un circuito de 290km 2.790m de desnivel pasando una noche en Guaduas.
El mayor porcentaje de este recorrido ya lo conocíamos por el viaje que hicimos el año anterior, así que hasta Cambao teníamos la confianza de avanzar a buen ritmo y superar el único puerto que es Alto Bituima. (Para más detalles de este segmento pueden verlo en la Travesía Bogotá-Cambao).
La parte por descubrir era el desde Cambao hasta Guaduas el cual consiste en 40 Km rectos con repechos en una autopista en muy buen estado pero que al ser tan reciente su construccion, para nuestra sorpresa los puntos de hidratación son tremendamente escasos, es decir solo encontramos 2 tiendas en donde unas cervezas y paquetes de papas fritas fueron nuestra salvación.
Una vez tomamos el desvío a Guaduas para comenzar el regreso subiendo el Alto de la Mona, tenemos la esperanza de que en el peaje exista algún tipo de restaurante o cafetería para comer decentemente, sin embargo, este viaje nos quiere enseñar una lección muy importante, y como un golpe para el espíritu y el cuerpo, no encontramos mas de una tienda abierta en la que una Pony Malta y un trozo de queso es lo que nos debe mantener hasta nuestro destino. Gastando nuestras ultimas reservas, avanzando lentamente, parando ocasionalmente para coger un respiro, tras casi 3.5 horas coronamos en la cima y descendemos los 7 km restantes hasta Guaduas, como si no hubiera un mañana y devoramos un pollo asado en el parque del pueblo.
Lección aprendida: No escatimes en llevar suficiente hidratación y alimento, es preferible cargar unos cuantos gramos más que sufrir por la escases, y ante la duda, detente y compra lo necesario si no conoces el camino por venir.
Jornada 2: Guaduas-Villeta-Bogotá
Inicia el día con el sol dándonos la bienvenido a una ruta espectacularmente montañosa. La subida al Alto del Trigo se siente manejable ya que la tupida vegetación y las curvas cerradas, nos brindan sombra para sobrellevar mejor el calor de esta región.
Pero conforme avanzamos y nos acercamos al inicio del Alto del Vino iniciando en Villeta, se acentúa la inseguridad, la ansiedad….conocemos el recorrido, lo hemos hecho en ocasiones anteriores, la comida no será problema como el día anterior; pero este puerto es largo-muy largo, con rampas duras y con buen sol…
Avanzamos lento pero constante. Lo más duro viene después del almuerzo en La Vega, la bici se hace pesada y no vamos a la velocidad acostumbrada….pero la verdad, no hay más, vamos a lo que podemos y a lo que las piernas nos permiten.
Pasan las horas, pasan los kilómetros y finalmente llegamos a nuestra ultima cima una hora más tarde de lo habitual….pero llegamos y se siente bien – muy bien¡¡.